
24 Feb Americana NEXT
Seis películas forman el Americana NEXT de este año. Seis apuestas del festival, de un cine más desconocido pero con mucha calidad y en las que trabaja gente que intuimos darán mucho de qué hablar en el futuro.
Una de ellas, Donald Cried, será la cinta inaugural del festival. Peter tiene que volver a su pueblo natal, una población de clase trabajadora, para ocuparse del papeleo que conlleva la muerte de su abuela. Su vida está en Nueva York, trabajando en Wall Street y no tiene la más mínima intención de quedase en un sitio deprimente que no pisa desde hace 15 años. Pero pierde su cartera en el viaje y se ve obligado a pedirle un favor a Donald, su vecino de infancia. Donald es un personaje al límite de todo, con una energía sin parangón y que llevará a Peter a un viaje más largo y excéntrico del que en un principio podía sospechar.
Kristopher Avedisian es el creador y protagonista absoluto de Donald Cried, su primer largo, una cinta financiada con micromecenazgo. Avedisian se destapa como un autor sensible, que sabe crear personajes atractivos, jugar con los matices y llevarnos de la comedia al drama en cualquier momento sin parecer gratuito. Así lo demuestran sus nominaciones y premios en festivales como Locarno, SXWS o Florida.
Una de las cintas que dará más de qué hablar de esta sección será sin duda la original Creative Control. En Brooklyn, en un futuro muy próximo, David, un ejecutivo con una vida personal razonablemente controlada, inventa unas gafas de realidad aumentada que además permiten crear avatares y él decide dar vida a una copia de la novia de su mejor amigo, de la que está secretamente enamorado. Al mismo tiempo, su mujer, una profesora de yoga, entra en crisis existencial y en una extraña etapa zen y quiere que David cambie de vida. Una película llena de tecnología, moda, diseño y vidas tan modernas como descontroladas. Vidas empujadas por una realidad que les va grande y contra la que deberán luchar para controlar, antes de ser devorados por ella.
Con una idea que nos recuerda un capítulo de Black Mirror pero con un tratamiento en blanco y negro exquisito y una trama que avanza con cierta lentitud (algunos críticos hablan de influencias de Antonioni, incluso) y que hasta se permite obvios homenajes a Kubrick, Creative Control nos enfrenta a una realidad tan moderna como próxima, en la que los valores y las metas están difusas, se nos escapan entre todo aquello que nos absorbe en el día a día. Premio especial del jurado en SXSW y parte del top 10 anual de películas independientes del National Board of Review.
Quizás la cinta más indie de este año sea Another Evil, una comedia con toques de terror hecha con más ilusión que medios pero con resultados evidentes. Dan y su mujer, Mary, tienen una segunda residencia en la montaña. La aprovechan para desconectar, pintar y pasar el rato en familia. El problema llega cuando Dan empieza a ver seres malignos que le despiertan de noche. Desesperado, decide ponerse en manos de un profesional y finalmente encuentra a Os, un exorcista “graduado”. Aunque Mary no lo ve del mismo modo, Dan se encierra un fin de semana con Os para intentar exorcizar la casa. Pero poco a poco descubrirá que Os es un personaje tan peculiar como los fantasmas que habitan la casa.
Carson Mell nos sirve un divertimento low cost que consigue exactamente aquello que pretende: entretener, hacer reír y provocar algún susto de infarto en el espectador. Mell demuestra en su primer largometraje que con (muy) poco dinero y una buena dirección de actores se puede conseguir exactamente aquello que buscas.
Divertida, entrañable y no exenta de dureza, Kicks es una sorprendente cinta que no deberíais dejar pasar. Brandon tiene quince años y vive en una situación de pobreza que le avergüenza. Además, en la escuela, su harapienta vestimenta es motivo de burla. Sueña con comprarse unas bambas Air Jordan con la inocente esperanza de que una vez las luzca en sus pies, su reputación cambiará. Un día, con todos sus ahorros se compra unas. Pero al instante se las robará un peligroso ladrón conocido como “Flaco”. Brandon, junto a sus dos únicos amigos, emprenderá un peligroso viaje cruzando Oakland con el fin de encontrarlo y recuperarlas. Su orgullo herido le llevará por ambientes oscuros y le hará acercarse a delincuentes de la peor categoría. Pero esta vez está seguro de uno cosa. Encontrará al “Flaco” y recuperará sus Air Jordan. Cueste lo que cueste. Incluso la vida.
Justin Tipping sorprende con esta fresca ópera prima que mezcla drama, comedia, cinta de aventuras, road movie y thriller. Con un estilo visual colorista y acelerado, acompañado siempre de una brillante banda sonora que es casi un personaje más de la historia. Destacan además unos jóvenes actores que cuesta creer que actúen y la monumental presencia de Mahershala Ali, en el reverso de su personaje de Moonlight, en un papel secundario pero potente. Presente en el Festival de Tribeca y en el Festival de Los Ángeles, la película tendrá su première española en Americana.
Directamente de la reciente Berlinale nos llega My Entire Highschool Sinking Into the Sea. No importa la edad que tengamos, una buena parte de nosotros nunca supera la escuela secundaria, para bien o para mal. Dash (Jason Schwartzman) y Assaf (Reggie Watts) trabajan en el periódico del instituto Tides High. Cuando su editora (Maya Rudolph) empieza a ofrecer asignaciones en solitario, Dash, llevado por los celos, publica un reportaje ficticio sobre la supuesta disfunción eréctil de Assaf. Tras ser castigado en el almacén de la escuela, Dash descubre registros que indican que el edificio no cumple la normativa y que en cualquier momento se puede desmoronar.
El novelista gráfico Dash Shaw (“Bottomless Belly Button”, “New School”) nos plantea en su primera incursión en la gran pantalla una alocada y bizarra película de catástrofes. Con el cromatismo de un caleidoscopio y en clave onírica, los personajes de My Entire High School Sinking Into the Sea se enfrentan al hundimiento de su instituto mientras luchan por sobrevivir al derrumbamiento de su amistad. Jason Schwartzman, Lena Dunham, Reggie Watts, Maya Rodolfo, Susan Sarandon y Alex Karpovsky forman el reparto vocal de esta creativa pieza de arte.
Y cierra la sesión de NEXT la comedia pura, The 4th. Aprovechando que su compañero de piso está fuera de la ciudad, Jamie, un ilustrador de 20 y tantos que vive en Los Ángeles planea una gran fiesta para celebrar el 4 de julio. El problema es que tiene un presupuesto limitado (está en la ruina). Cuando se da cuenta que se ha dejado parte de la compra en el súper, decide coger la bicicleta de su compañero para acercarse en un momento. Ésta será la primera de muchas decisiones equivocadas que pueden convertir el día de la independencia en un infierno de situaciones incómodas. Los Ángeles se convertirá en un territorio hostil para un hombre que sólo quiere una buena hamburguesa en buena compañía.
André Hyland se dio a conocer con su cortometraje Funnel (2014). Buenas críticas en Sundance y decenas de miles de reproducciones en Youtube demostraron su capacidad para la comedia. A partir de aquí, canales como Funny or Die, Comedy Central, la MTV o Bob Odenkirk (Better Call Saul) han contratado su servicios como guionista y actor. Ahora nos presenta su primer largo, The 4th, una slacker comedy escrita y protagonizada por él mismo. Hyland nos presenta una retahíla de personajes egoístas y sin ningún tipo de empatía que tienen Los Ángeles como escenario incontrolable.