
24 nov. Noviembre indie 2015: “Grandma” y “Mistress America”
Noviembre nos remoja con un par de títulos indies que reflexionan activamente alrededor de las relaciones mediante personajes liberales y un tanto particulares que afrontan situaciones de su pasado para intentar estabilizar su presente.
Grandma
Grandma nos ofrece un personaje tan carismático como la abuela Lily Tomlin, una malcarada y rabiosa lesbiana que tanto lleva a la carcajada como al llanto. Este dramedy, cuyo paso por el Sundance Film Festival y el Los Angeles Film Festival hicieron mucho ruido tanto que hasta se especuló alguna nominación para los Oscars, conduce al espectador a lo largo del viaje que emprenden Elle y su nieta Sage para conseguir alcanzar la suma de la operación de aborto de la joven.
Sin esconderlo o dejarlo de lado, utiliza como detonante de toda la acción que mueve a los personajes esa situación para mostrar los estratos que han ido formando las bases de la irreverente Elle. Lesbiana, divorciada, viuda e independiente, la fuerza dramática que atrae consigo el personaje hace que sea suficientemente potente como para sostener a sus espaldas todo el film.
Como antecedentes más próximos teníamos en Nebraska a un padre y un hijo en busca de una supuesta recompensa, en Ida nos mostraban el viaje de una aprendiz de monja y su tía prostituta para encontrar la tumba de sus padres, en Dos días, una noche el viaje de una trabajadora para impedir su despido…es gratificante ver como el cine americano empieza a mojarse en tema recurrentes y actuales como el aborto. Grandma apoya firmemente la libertad de la mujer al hacer decisiones de este tipo y caricaturiza la obcecación de grupos y/o personas antiaborto con una mentalidad algo retrograda.
Necesaria, divertida, entretenida y para nada superficial, Grandma deja de lado cualquier pretensión para afrontar de cara todos los problemas surgidos y responder ante ellos con una sinceridad conmovedora. Es un must-seen del 2015 cinematográfico.
Mistress America
Escrita a cuatros manos entre director y actriz principal, Noah Baumbach y Greta Gerwig repiten la misma fórmula que tan útil les fue en su pasado, para contar la historia de amistad entre dos neoyorquinas. Reemprenden el rol de protagonista femenina que se enfrenta al entorno (dócilmente) hostil de Nueva York donde temes más al fracaso o la soledad que a la misma muerte. Resulta lógico que teniendo un pasado marcado por la etiqueta mumblecore (cine de muy bajo presupuesto), en el caso de él por su puesta al mercado con Frances Ha y de ella por actuar en films como Baghead de los hermanos Duplass o LOL, hayan cuajado tan bien en un estilo.
Conocedores de sus capacidades, llevan otra vez a la gran pantalla a dos personajes opuestos pero simbióticos: Tracy, una universitaria tímida con dotes para la escritura, y su futura hermanastra Brooke, una emprendedora treintañera con una vitalidad y una actitud desbordantes. En un principio el personaje de Gerwig empieza siendo un propulsor para Tracy aunque poco a poco vemos como llegan a una simbiosis donde una no puede llegar más allá sin la otra. Tracy escribe sobre toda la relación que mantiene con Brooke, excusa que utilizan los guionistas para narrar el film mediante la visión de ella, justificando así el tono cómico con pinceladas trágicas envuelto en una forma más pertinente a la fábula o moraleja.
Alejándose de referentes con roles femeninos marcados como Thelma y Louise o La vida de Adèle; la trama se nutre de un tono más pertinente a los films de Woody Allen añadiéndole un edulcorante más propio del género screwball comedy. La comedia verbal con juegos de palabras y bromas vertiginosas, dan pie a un montaje exagerado potenciado constantemente con una música y gags visuales.
Muy personalmente, veo un retrato del mundo más chic y moderno del centro y periferia de Manhattan, visto con unos ojos críticos y condenatorios. La parafernalia formal que se nos propone da un espacio respeto al film que permite al espectador juzgar ávidamente lo que ve. No sentimos empatía por el personaje de Gerwig, algo insoportable y repelente, pero consigue en momentos que perdonemos a la mujer sus pecados. Redundante film que solo destaca la actuación de Gerwig que consigue nuestro odio y perdón indistintamente.